enero 21, 2021 | Comments Closed |
Invierno tras invierno muchas personas se plantean la misma pregunta, ¿es mejor apagar la calefacción o dejarla encendida?
Hay opiniones de todos los tipos y son muchas las casas que están vacías prácticamente todo el día, entonces en este caso ¿es mejor apagarla y una vez se llega a casa encenderla?.
Pues bien, mucha gente piensa así. Pero ahora nos planteamos, ¿no es más costoso encenderla y apagarla día tras día?
Todo dependerá de la instalación de calefacción que se tenga, de cómo funciona y de cada vivienda, así que, en este blog te daremos respuesta a la gran pregunta teniendo en cuenta todo lo que acabamos de mencionar.
Veamos qué opción permite ahorrar más con la instalación de la calefacción.
En primer lugar vamos a recordar como funciona la calefacción y antes de decidir si es mejor apagarla o dejarla encendida, es imprescindible conocer esta información.
Cuando se enciende la calefacción en una casa se hace con el objetivo de aumentar la temperatura de esta para entrar en calor y que todas las estancias estén caldeadas.
Hay muchos tipos de calefacción, cada uno de ellos utiliza una manera para conseguir el objetivo de calentar una estancia concreta o un espacio más amplio.
Dependiendo de lo grande que sea la estancia a calentar se debe instalar un sistema de calefacción adecuado que sea capaz de elevar la temperatura de manera correcta.
Si esto no lo tenemos en cuenta estaríamos desperdiciando la energía de la instalación.
Sabemos que escoger la mejor instalación de calefacción no es tarea fácil, por eso, en Elías Varas contamos con asesores profesionales que te ayudarán a encontrar el tipo de calefacción adecuado para tu hogar y tus necesidades.
Vamos a analizar primero qué sucedería si se apaga y enciende la calefacción:
Si la calefacción está apagada no está consumiendo energía por lo que el gasto sería nulo. Estando la calefacción apagada, cuando vayamos a encenderla consumirá más energía hasta conseguir llegar a la temperatura adecuada y calentar toda la estancia.
Una vez se apaga la calefacción, la temperatura desciende considerablemente. Lo ideal en estos casos sería usar mantas u otras cosas para mantener tu calor corporal, sobre todo si se apaga la calefacción por las noches.
Ahora veremos qué sucede cuando se deja la calefacción puesta durante todo el día, modificando la temperatura, pero sin llegar a apagarla.
El calor no se pierde y se mantiene ya que la calefacción no se corta a lo largo del día. El consumo y gasto de energía es continuo debido a que la calefacción permanece encendida constantemente.
A pesar de todas las medidas de aislamiento que tenga la estancia, siempre hay alguna pérdida de calor. En estos casos se puede dar un incremento en el consumo de energía.
El calor se mantiene a lo largo de todo el día, incluso por las noches. Pero esto se traducirá en un constante consumo de energía.
A la mayoría de personas lo que realmente les importa es ver cómo se traduce esto en sus bolsillos, es decir, que opción será más beneficiosa para su economía.
Como acabamos de explicar, hay bastantes diferencias entre las dos opciones.
Si se opta por dejar la calefacción todo el día encendida es importante tener en cuenta que el consumo de energía va a ser constante, al igual que el de calor. El uso de este calor no siempre será de manera eficaz ya que, en muchas estancias este calor se puede escapar por puertas, ventanas, paredes, etc. Si pasa esto, el uso de energía aumenta para conseguir llegar de nuevo a la temperatura de confort.
Y es aquí cuando respondemos a la gran pregunta, ¿es mejor dejar encendida la calefacción durante todo el día o apagarla y encenderla?
Pues bien, la mejor opción para nuestros bolsillos es encender y apagar la calefacción.
El consumo constante de energía siempre va a ser mayor que el consumo de energía que se necesite para volver a poner en marcha la instalación.
Según el IDAE (Instituto para la Diversificación y el Ahorro Energético) esto es así ya que, aunque se module la temperatura al mínimo, la calefacción está encendida todo el día. De la otra manera, el consumo solo es más elevado al principio hasta conseguir una temperatura estable.
Aunque ya hemos dado respuesta a la pregunta más importante de todas, conviene aclarar que para tomar esta decisión hay que tener en cuenta en qué situación nos encontramos.
A continuación te dejamos las más comunes:
Si vas a estar fuera de casa durante un largo periodo de tiempo, dejar la calefacción encendida supone un gasto de energía y calor innecesario. Nadie va a disfrutar de ese calor, por eso desde Elías Varas recomendamos que no se deje encendida.
Siempre hay que señalar que esta decisión es personal de cada uno y que se debe tener en cuenta el tipo de vivienda, la ubicación y por supuesto, como está aislada.
El consumo y gasto de energía de volver a encender la instalación y conseguir la temperatura de confort siempre será menor que el de mantener la calefacción encendida de manera constante.
Si te preocupa llegar a casa y que esta esté fría por no mantener la calefacción encendida te recomendamos que instales un termostato programable y que dejes las horas de encendido programadas para que al llegar a casa, esté todo calentito y a la temperatura de confort.
Con los termostatos WIFI, vas a poder incluso encender la instalación estando fuera de casa y usando únicamente tu móvil o tablet.
No olvides que cada habitación de la casa es distinta y no todas tendrán las mismas necesidades térmicas.
Las estancias más utilizadas por los que habiten en esa casa, serán las que más calor necesiten.
Cerrar las ventanas cuando la calefacción está funcionando o cerrar la puerta de las estancias donde no está encendida para que el calor se distribuya por el resto de la casa, son pequeñas acciones que harán que el calor se aproveche mejor.
Instalar ambos tipos de sistemas es algo imprescindible en todos los hogares o estancias.
Ambas decisiones van a tener repercusión en el medio ambiente, sobre todo dependiendo del tipo de calefacción que se tenga instalado.
Esto depende de la cantidad de CO2 que emita tu sistema de calefacción. Si emite mucha cantidad de este gas y la mantienes todo el día encendida, la contaminación va a ser mucho mayor.
Lo ideal en los sistemas de mucha emisión de CO2 es optar por encender y apagar la instalación para intentar contaminar lo menos posible.
Ahora que ya hay respuesta a la gran pregunta recuerda que hay otros muchos factores a tener en cuenta para no desperdiciar el calor de las casas y estar siempre a la temperatura perfecta.